¿Cómo se hace?
Se comienza a trabajar el diafragma, músculo encargado de habilitar la respiración nutritiva, así como también de bloquearla ante situaciones de estrés y ansiedad. Se prosigue por el cuello, el cuero cabelludo, el rostro, la espalda y finalmente se aplican técnicas de reflexología en los pies. Se utilizan aceites esenciales que fomenten la relajación mental.
Preparación: el masajista prepara el ambiente para que este sea relajante y hace un calentamiento con sus manos para que estas fluyan con mayor destreza. El paciente se prepara poniéndose ropa muy ligera. Se masajea con la palma abierta los músculos pegados a la columna. Se comienza dese la cadera y se sube hacia el cuello. El movimiento es desde las vértebras hacia afuera.
Tratamiento: utilizamos aceites de aromaterapia y ponemos música ambiental relajante.
Post tratamiento: finalizamos aplicando un masaje en el rostro, desde los costados de la nariz hacia las mejillas.
En casa: vida normal
Tiempos
¿Cuánto dura cada sesión?: entre 50 y 60 minutos
¿Cuántas sesiones?: No existe un límite, ya que cada paciente tiene distintas necesidades. Se recomienda el masaje antiestrés cuando el cuerpo vea limitados sus movimientos habituales debido a la tensión o cuando el paciente se sienta desbordado emocionalmente.
¿Cuánto se nota?: desde la primera sesión
¿Cuál es la duración del efecto?: dependerá de cada persona y de cómo le afecte el estrés.
Incorporación a la vida diaria: la tensión mental se libera a lo largo de la sesión, sensación que persiste mucho más allá de la atención en el consultorio. Se disipan los pensamientos negativos, se logra un descanso efectivo y el paciente recupera el equilibrio cuerpo-mente.